EL VAGÓN CON PROPÓSITO

 EL VAGÓN CON PROPÓSITO

Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman. Santiago 1.12

A menudo nos preguntamos porque la gente deja de asistir o creer en lo Eterno. Unos comienzan con el gran apogeo del primer amor; donde en esos días se convierten los mejores; a todo el mundo desean contarle de lo que es Jesús, miran milagros, prodigios lo sobrenatural del Cielo.

Pasados unos días, meses o años la tortilla se volvió diferente, se vuelven tan indiferentes, con corazones de piedras. Hay quienes dicen que es porque dejaron de congregarse, pusieron la mirada en la gente, la prueba los ahogó, se volvieron infructíferos en el reino, cesó la oración y la búsqueda del Señor.

Yo tengo mi punto de vista el cual he llegado a comprender del porque la gente se va de los ministerios y dejan de creer en el reino y es “LA FALTA DE GRATITUD”.

Como seres humanos se nos olvida rápido, quien nos dio la mano, quien nos ha sanado y quien nos restauró; cuando no hay gratitud en el corazón te volverás como los demás que vagan en este mundo sin esperanzas, afanados a lo que presenta el mundo, te conviertes es un distractor, calumnias, murmuras y la queja en su boca es como un veneno.  

Hay miles de promesas para aquellos que obedecen hasta el final, en el vagón vamos a todos aquellos que perseveran, sabiendo que el mundo tendremos aflicciones, pero confiando en el Señor El se encargará de ayudarnos.

Si fuiste excluido de ese vagón es tiempo de meditar y comenzar nuevamente, Dios es un Dios de oportunidades y lo que va a funcionar en el reino son tres elementos fundamentales para que tu vida espiritual sea fructifica.

-      Persevera con alegría

-       Enfócate en las cosas del Cielo

-      Ten un corazón lleno de gratitud.